Me encantan las croquetas, pero nunca las había hecho. Cada vez que vuelvo a Madrid las como de tapeo porque me gustan las nuestras, las de bechamel, mucho más que las italianas que son de pasta de patata. Para mi gusto las mejores croquetas son las del bar Melos, un gallego que está en el barrio de Lavapiés. Una amiga dice que el secreto es que le meten queso en la masa, puede ser, esta receta no lo lleva, es la receta de mi madre, tan sencilla que hasta la primera vez salen exquisitas.
Ingredientes para una buena fuente
Para la masa:
1 litro de leche

75g de mantequilla
Pollo, yo he aprovechado las sobras de un pollo asado del día anterior, para eso sirven las croquetas… he metido como un cuarto. Siempre se puede comprar una pechuga y cocerla o sustituir el pollo por jamón.
Sal
Para freír las croquetas:
Aceite de oliva ( o de semillas, lo que utilices para freír)
1 huevo
Pan rallado

Para hacer las croquetas vamos a pasarlas por huevo y pan rallado antes de freírlas. Utiliza un par de cucharas para coger la masa y modélala pasándola de una a otra de forma que queden con forma de croqueta, o directamente con las manos. Luego pásalas por el huevo batido y a continuación por el pan rallado y déjalas todas en un platito antes de empezar a freírlas. Hay quien para darle mas enjundia a la croqueta antes de pasarlas por huevo, las pasa por harina, pero así absorben mas aceite durante la fritura, en realidad basta con una pasada por pan rallado.
Una vez tenemos nuestras croquetas, las freímos en abundante aceite, con el aceite bien caliente y al sacarlas las dejamos en papel absorbente para que suelten el aceite en exceso.
El trabajo y el tiempo empleado para hacerlas merecen la pena.
Te han quedado muy buenas éstas croquetas!!... Y opino que el pollo es el ingrediente que más le va a ésta masa.
ResponderEliminarBicos
Acabo de llegar de Madrid y una de las cosas que he dejado sin hacer es una tarde de croquetas con mi madr: Desde que me salieron una vez duras, allá por el 2001, no me he atrevido de nuevo, y eso que sólo fue la primera vez que salieron mal después de muchas horas de delicias croqueteras. Por aquel entonces mi tolerancia al fracaso era muy baja. A lo que iba: Que en cuanto tenga un fin de semana, me hago unas croquetas.
ResponderEliminarYo no las cocinaba con mantequilla, que siempre me ha sentado muy mal, sino con aceite de oliva, y las echaba un poco de nuez moscada, que le dan un buen saver. Pero es asunto de gustos, sobre lo que hay mucho escrito, pero el paladar propio manda.
Ah, y he comprado una calabaza para hacer risoto del tuyo, que desde que estoy en este estado no paro de comer arroz, cuando, antes, estuve varios años de reposo arrocero.
Sigue ilustrándonos, por favor.
Muchas gracias por vuestros comentarios!
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con Rosa en cuanto a la mantequilla, yo siempre prefiero usar el aceite de oliva, mi madre nunca utilizaba la mantequilla para cocinar, excepto para las croquetas, probare con aceite y nuez moscada la próxima vez!
Ya me contaras que tal te ha quedado el risotto